Las imágenes satelitales muestran la construcción de un nuevo complejo militar cerca de Minsk. En lo que fue una nuclear soviética en tiempos de la Guerra Fría, se perciben extensos movimientos de tierra y la construcción de varias áreas conectadas por nuevas carreteras en el … distrito de Slutsk, cerca del pueblo de Pavlovka, a unos 60 kilómetros de Minsk y a 245 kilómetros de la frontera con Polonia. La investigación publicada por Free Europe, con la colaboración de medios de Estonia, ha demostrado el trabajo previo de deforestación y los trabajos de construcción de edificios y sistemas de comunicaciones.
Las imágenes muestran cuatro sectores separados en un área de más de dos kilómetros cuadrados, con al menos 13 depósitos de municiones detrás de muros protectores, tres salas de unos 100 metros de largo cada una y cimientos preparados para levantar otros edificios. No existen documentos oficiales bielorrusos ni entradas catastrales sobre el proyecto, y las agencias estatales no han hecho comentarios, por lo que se trata de un proyecto secreto.
Las antiguas instalaciones fueron parte de la infraestructura nuclear en la época soviética, la base del 306ª del Regimiento de Misiles Estratégicos y una unidad de suministro nuclear se ubicaron allí hasta 1993. La nueva obra se sirve de su diseño topográfico y mantiene, por ejemplo, un sector oriental elevado y adecuado para la defensa aérea. Se sospecha que podría albergar el sistema ruso de misiles de mediano alcance Orezhnik, que tiene capacidad nuclear, alcance superior a los 2.000 kilómetros y que ya fue utilizado en Ucrania en 2024. El informe encaja con otros anteriores de servicios de inteligencia occidentales sobre las intenciones rusas de estacionar armas nucleares en Bielorrusia y complementa otros anteriores sobre nuevas bases militares y modernización de las antiguas en el país.
Entre estos proyectos se encuentra una base en construcción en las afueras de Homel, a menos de 40 kilómetros de la frontera con Ucrania. Hasta ahora, se consideraba un depósito militar cerca de Asipovichy, en el centro de Bielorrusia, y una posible ubicación de almacenamiento en Prudok, cerca de la frontera noreste, que acercan significativamente el alcance nuclear ruso a países de la OTAN como Polonia, Lituania y Letonia. Alexander Lukashenko, presidente de Bielorrusia, lo ha confirmado públicamente: «He traído ojivas nucleares aquí, y no solo una docena de ellas»; y Putin ha declarado que estas armas están destinadas a proteger a Bielorrusia en caso de agresión, y ha actualizado la doctrina nuclear rusa para permitir su uso incluso ante ataques convencionales.
«Probablemente, la base de Pavlovka albergará armas nucleares o habrá allí un componente nuclear asociado», estima el analista de seguridad Konrad Muzyka , que considera las instalaciones muy adecuadas para el sistema ruso IRBM. Durante las maniobras militares rusas-bielorrusas Zapad-2025, se están realizando precisamente simulacros de lanzamiento de los Orezhnik y otras armas nucleares tácticas, según ha confirmado el ministro de Defensa bielorruso.
Maniobras conjuntas
«Las maniobras Zapad 2025, que se llevan a cabo con el fin de mejorar las habilidades de los comandantes en la gestión de grupos de tropas para proteger la soberanía y la integridad territorial del país, transcurren sin incidencias», comunicaba ayer el Jefe del Estado Mayor de Bielorrusia, el general de división Pavel Muraveiko, que insistía en que «nuestro ejercicio no está dirigido contra ningún país o países específicos», parafraseando al portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov. Informó, además, que «ya hoy, las primeras unidades realizarán disparos reales en los campos de entrenamiento, resolviendo los problemas de combatir vehículos aéreos no tripulados, repeler ataques aéreos y acciones en formaciones de combate mixtas».