3 (micro) rituales para cuidar nuestro bienestar emocional
¿Cuántas cosas hacemos en el día que no nos sitúan en el lugar en el que nos gustaría estar? Quedar por compromiso con alguien cuando realmente necesitas estar a solas; no saber decir no; compararse constantemente… Vivir en piloto automático es una realidad que hemos tendido a normalizar y que nos está restando mucho bienestar emocional. Por eso cada vez son más los expertos que invitan a que autorreflexionemos para empezar a ejecutar pequeños cambios –esa es la clave, que sean pequeños y nuestra mente tenga la capacidad de incorporarlos poco a poco– para proteger nuestra salud emocional. Mel Robbins, por ejemplo, hace unas semanas dedicaba uno de sus podcast a esas preguntas que deberíamos hacernos para conectar con lo que de verdad nos hace sentir bien: ¿Cómo estás realmente ahora?/¿Con quién te gustaría pasar más tiempo? ¿Qué te está restando energía sin que te des cuenta?
La psicóloga Marta Calderero, directora del centro virtual PERSONALIFE Style, nos propone 3 (micro) rituales para centrarnos en lo que de verdad nos importa y nos hace sentir bien.
#1. ¿Esto me suma o me resta?
No todo es blanco o negro, pero la experta aconseja que hagamos una pequeña autorreflexión consciente de lo que nos gusta y no nos gusta para conectar “con nuestra identidad más auténtica, para saber quiénes soy realmente. A veces, si lo pensamos, hacemos cosas que no nos representan tanto. Por eso se trata de hacer un pequeño análisis y preguntarse si esto me suma o me resta, me aporta energía o me la quita”, señala la experta. Y es que el concepto de sumar o restar ayuda, dice, a hacer un diálogo pequeño pero poderoso y muy funcional para saber “lo que debo soltar y lo que debo retener para centrarme en lo que me gusta, me importa, me define y mejora el bienestar”.
#2. Un repaso a tu perfil en redes sociales (y no al de los demás)
Resulta francamente difícil no compararse cuando conocemos (vía Instagram) la faceta perfecta de la vida de los demás (decimos ‘perfecta’ porque suele ser siempre la que se muestra en redes sociales). Pero Calderero propone salir de esa comparación con un ejercicio sencillo: entrar a nuestro perfil y repasar nuestro álbum de fotos para, de esta forma, ser conscientes de lo que es nuestra vida y de lo que nos gusta y hemos disfrutado. “Así conectamos con los recuerdos que son identitarios y tienen un significado emocional grande para nosotros. Esos recuerdos nos pueden ayudar a proponer y hacer más planes que tengan esa esencia”, aconseja la psicóloga.
#3. Cuidar tu contexto
La psicóloga no se refiere tanto a cuidar el espacio físico o a las circunstancias (que también es importante), sino al contexto social, las personas que te quieren y te importan. “Volver a mirar con los ojos del cariño y del aprecio a las personas que están en tu vida y te suman es un factor protector para la salud emocional y para situarte donde quieres estar”, añade la experta. Así que mandar un wasap acordándote de esa persona que aprecias puede ser un buen ejemplo de micro (ritual) que ayuda a que te sientas mucho mejor.