La guerra en Ucrania lleva camino de cumplir cuatro años, Europa inicia un proceso agudo de rearme, el presupuesto de Defensa crece, la Unión Europea y la OTAN viven otro momento de tensión con Rusia… pero la Conferencia Sectorial para Asuntos de la Seguridad Nacional no se ha reunido una sola vez en esta peligrosa época.
El principal espacio de interlocución interterritorial, junta entre el Gobierno y las comunidades autónomas, para temas de defensa y de amenazas para el país no ha sentado a sus miembros desde 2021 pese a su misión de “órgano de cooperación” entre los dos escalones del Estado, que declara en en sus estatutos.
De hecho, la conferencia solo se ha reunido tres veces en toda su existencia: en 2018, 2020 y 2021, y la primera fue por su fundación. En este detalles se fijó el director del Instituto de Estudios del Autogobierno, Xavier Arbós, durante una intervención suya en la sesión final de trabajo de las jornadas de historia del Regimiento Barcelona del Ejército, las guerras de la Edad Moderna en Catalunya y la conformación de una identidad de defensa en Europa, organizadas en el monasterio de Poblet por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
Todos a una… o no
Las jornadas de Poblet tienen una doble vertiente de reflexión: la historiográfica y la estratégica. Arbós, catedrático en la Universidad de Barcelona, uno de los más reconocidos expertos en Derecho Constitucional de España, habló más de la segunda que de la primera, en una sesión dedicada a las vías y el impulso público y privado de construcción de una conciencia de defensa.
Arbós reconoció que las razones previstas para convocar a las comunidades al Consejo de Seguridad Nacional -foro de primer nivel de decisión estatal- son extraordinarias, pero no las que se pensaron para convocar este otro foro, de carácter interterritorial, en una etapa en la que el impulso al rearme y las previsiones de aumento de tropas en España, “afectan a responsabilidades compartidas” entre el poder central y el autonómico.
La pregunta de si tienen algo que decir las comunidades autónomas en materia de defensa -más allá de las gestiones de sus gobiernos a la caza de inversiones- se queda de momento sin contestar, dado que se abre espacio para escucharlas. Y eso, en opinión de Arbós, daña “la construcción de una política pública armónica, basada en criterios comunes”.
Una de las mesas de trabajo de historiadores en las jornadas en Poblet. / Marc Asensio Clupes
La intervención del jurista -principal figura de la Generalitat de Catalunya presente en la clausura de las jornadas de Poblet- es la que más contenido político ha tenido a lo largo de estos días de diálogo historiográfico entre intelectuales y militares en el emblemático monasterio catalán.
En la misma sesión de clausura, Arbós propuso un gesto de normalización: que Defensa “deje de ser el único ministerio sin pestaña para lenguas como el catalán en su página web”, recurso que sí incorporan otros organismos de la Seguridad del Estado, como la Guardia Civil o la Policía Nacional.
Llama y cenizas
Las jornadas de Poblet llegaron a su final este viernes, 24 horas antes de la celebración del día del Regimiento Barcelona en el cuartel barcelonés de El Bruc.
En esa sesión final de trabajo, la vicedirectora del Instituto de Historia del CSIC, Dolores González-Ripoll, abogó por la generación de una conciencia cívica de defensa basada en valores y raíces históricas, “sin que por ello se deba pasar por la creación de un enemigo”
Se ha hablado de defensa, y también de paz, en Poblet, junto a las tumbas de reyes de la corona de Aragón, y en las proximidades del archivo que Josep Tarradellas mantenía meticulosamente ordenado. Y también la industria y la empresa han tenido su espacio, en las figuras de Jaume Sanpera, consejero delegado de Sateliot, la firma catalana que trabaja en una constelación de satélites con utilidades civiles y militares, y José Ramón Bosch, consejero delegado de The Grey, canalizadora de inversiones del fondo Hyperion -en el que participa el exlíder del PP, Pablo Casado– hacia firmas del sector de la defensa.
Pero ha sido la investigación histórica la base principal del ciclo, investigación centrada en las guerras catalanas del siglo XVII y XVIII -en las que nació la tradición del Tercio de Barcelona, de la que ahora es heredero el Regimiento de Infantería Barcelona 63-, con la participación de figuras de la historiografía como Joaquim Albareda, Víctor Jurado, Ángel Casals, Enrique García Hernán o Jaume Dantí.
La historia como iluminadora y no como enterradora del presente. Xavier Arbós, pronunciando unas palabras para la clausura, recuperó -”sin ser tradicionalista”, apuntó- unas palabras del filósofo alemán Hans Georg Gadamer: “El respeto a la tradición no es la adoración de las cenizas, sino la preservación de la llama”.
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