Javier EspinosaEnviado especial Chisinau
Enviado especial Chisinau
Actualizado Domingo,
28
septiembre
2025
–
15:08
Las elecciones legislativas que se registran hoy en Moldavia se han visto ensombrecidas por un ciberataque masivo contra un amplio número de páginas oficiales del país, y en especial la de la Comisión Central Electoral, que supervisa los comicios. Según informó la agencia IPN, los equipos técnicos consiguieron bloquear la ofensiva digital, que con todo consiguió paralizar el servicio de 4.000 sitios web.
El ciberataque se combinó con una sucesión de alertas por bomba que se recibieron en varios centros de votación ubicados en países extranjeros. Los incidentes obligaron a paralizar el sufragio en estas localidades, entre las que figuraban Roma, Bucarest o Alicante, en España.
El Ministerio de Exteriores del país difundió un comunicado en el que acusaba tácitamente a Moscú de estar detrás de estas acciones. “Las autoridades habían advertido exactamente que esto sucedería como parte del asalto de Rusia contra el proceso electoral en la República de Moldavia”, se leía en el texto.
Los llamamientos alertando falsamente de la existencia de explosivos en centros de votación ubicados en el extranjero también fueron uno de los incidentes más significativos de los sufragios presidenciales, cuando este tipo de altercados superaron la docena.
Las encuestas previas a estos sufragios estimaban que el Partido Acción y Solidaridad (PAS) de la presidenta Maia Sandu podría perder la mayoría absoluta que tiene ahora mismo en el Parlamento de 101 diputados ante el deterioro de la situación económica del país. La desafección generada por esta coyuntura parece haber reforzado las opciones electorales de las agrupaciones prorrusas, aliadas principalmente en el llamado Bloque Patriótico.
Los votos de la diáspora fueron decisivos a la hora de determinar tanto las presidenciales como el referéndum sobre la posible integración de Moldavia en la UE del año pasado.
Ambas convocatorias confirmaron la extrema polarización de la sociedad moldava, partida en dos literalmente. En la primera cita, Maia Sandu perdió en el interior del país al cosechar sólo un 48,81% de los votos frente al 51,19% de su adversario, Alexander Stoyanoglo. Un resultado que revirtió el voto procedente del extranjero, que fue en un 82,71% favorable a la actual jefa de Estado.
En la región autónoma de Gagauzia, por ejemplo, Stoyanoglo obtuvo en la cita presidencial un abrumador 97,04% de las papeletas, lo que incide en la absoluta desconexión de la autonomía respecto a Chisinau. Lo mismo ocurrió en Transnistria -un territorio al margen del control de Chisinau-, donde el aspirante prorruso consiguió un 80% de los votos.
La consulta en torno a la UE siguió el mismo guión y sólo ganó por un puñado de votos -con un 50,39%- procedentes del extranjero. La diferencia fue de unas 11.600 papeletas. Un 95% del electorado de Gagauzia votó en contra de la opción europea.
Llamamiento a la diáspora
Quizá por eso, Maia Sandu lanzó un nuevo mensaje durante la jornada a los expatriados desatando la controversia entre la oposición, que la acusó de violar las normas electorales.
La dirigente les exhortó a votar y a elegir “el camino europeo”. “Les insto a no permitir que otros nos roben el futuro, a proteger a Moldavia”, señaló en un mensaje de vídeo.
La participación a primera hora de la tarde parecía destinada a superar la que se registró en las presidenciales del año pasado, cuando votaron cerca de 1,6 millones de personas (un 54% del electorado). A las 3, las autoridades electorales ya habían contabilizado más de un millón de votantes.
La campaña previa a la cita se ha visto alterada por una operación masiva de desinformación a través de las redes sociales y la detención de más de un centenar de activistas que habían sido entrenados en Serbia para provocar alborotos el mismo día de las votaciones.
La organización local Promolex informó el pasado día 19 sobre la existencia de una “red masiva de cuentas falsas” en Tik Tok, que -según su investigación- operaban “con una disciplina militar” y usaban imágenes de presentadores reales de la Tv local con la voz adulterada gracias a la inteligencia artificial para difundir noticias ficticias. Uno de los deep-fake (vídeos creados digitalmente) llegó a recrear un discurso inexistencia del primer ministro Dorin Recean usando su figura real.
Tik Tok admitió que entre el 1 de julio y el 9 de septiembre tuvo que bloquear más de 350.000 cuentas falsas, usadas para promover la narrativa prorrusa.