Clara Galle brilla con luz propia en la Biennale con un diseño de Armani Privé y joyas de Tous Atelier
Clara Galle está en la cresta de la ola. Después de exitazos como la saga A través de mi ventana, la miniserie de Netflix Ni una más y de su salto internacional en la tercera temporada de The Head, la actriz ha visto este año cómo se ha acrecentado aún más su fama con Olympo, la ficción juvenil ambientada en un centro de alto rendimiento. Y así, con una codiciable carrera a sus escasos 23 años, ha vuelto a pisar la alfombra roja del prestigioso Festival de Venecia.
Concretamente, asistió al estreno de Frankenstein de Guillermo del Toro, la cual cuenta con un cartel de lujo con figuras como Jacob Elordi, Mia Goth y Oscar Isaac, entre otros. Una cita cinematográfica que congregó a lo mejorcito del séptimo arte y en la que Galle demostró por qué se ha convertido en uno de los nombres más sonados de su generación. Lo hizo, cómo no, de la mano de Armani Privé, firma de la que es embajadora oficial.
El vestido que escogió para esta ocasión es una auténtica pieza de ensueño que reinterpreta la estética de princesa moderna. Confeccionado en fino tul en un delicado tono rosa empolvado, se distinguía por su silueta, que ajustaba la figura en la parte superior y se abría en una amplia falda que caía hasta el suelo con un volumen majestuoso. El corpiño, de escote halter, estaba adornado con bordados de pedrería en tonos plateados, rosas y verdes que dibujaban motivos florales, aportando un aire sofisticado y aún más femenino a las transparencias que lo componían. La falda, por su parte, estaba estructurada en capas horizontales rematadas con destellos de purpurina.
Armani Privé Couture primavera-verano 2024.