Anne Hathaway combina múltiples tendencias de este otoño 2025 en su último estilismo en el set
Desde cómo perfeccionar la estética de oficina (o corpcore), pasando por cómo crear una colección de sandalias ugly, hasta cómo combinar los vaqueros de bajo vuelto (tendencia absoluta de la temporada) con botines: los estilismos de Anne Hathaway en El diablo viste de Prada 2 están configurando un auténtico manual de estilo para este otoño. Una especie de guía que, con cada imagen del rodaje, se va completando con maestría.
Ayer en Nueva York, la actriz volvía a ponerse delante de las cámaras con un look de reminiscencias preppy, pero que se sentía moderno. Un conjunto colegial –en su versión madura, claro– que combinaba con soltura varias de las tendencias más buscadas de los próximos meses. Empezando por la falda de tablas, la suya, de color negro, poseía un corte midi que se alargaba hasta las rodillas, tal y como lo haría la (a veces, odiada) prenda del mítico uniforme escolar que a todas se nos viene a la cabeza.
Llevó también una camiseta de manga larga de tejido semitransparente impresa con un motivo de cuadros en tonos neutros, tal y como se ha reinterpretado este estampado, que siempre regresa en cuanto caen las primeras hojas de los árboles, en los desfiles de algunas de nuestras marcas favoritas. En el caso de Anne, este uniforme se veía reinventado también gracias a sus sandalias de tiras con tachuelas doradas –un diseño que, por cierto, podríamos haber llevado perfectamente en la década de 2010–, unas gafas de sol con montura aviador retro y cristal anaranjado (más tarde, las cambió por unas negras) y el collar de perlas de Jemma Wynne que ya ha acompañado al personaje en múltiples atuendos.
James Devaney