El jabón de manos que causa furor: Resurrection Aromatique Hand Wash de Aesop
¿Qué tienen e común los restaurantes nuevos, los hoteles sofisticados y los hogares de la gente más cool; esos espacios donde todo está cuidado al detalle –la iluminación es perfecta, las flores están recién cortadas y la música que parece elegida solo para ti–? Que la mayor parte de las veces encontrarás Resurrection Aromatique Hand Wash de Aesop en el cuarto de baño. Si ya lo habías probado, sonríes, como si respondieras a ente guiño entre connaisseurs que te ofrece el anfitrión. Si no, bienvenido al club: este jabón de manos es el elemento común a los lugares donde todos queremos estar.
No es casualidad. “Aesop otorga una importancia central a sus jabones de manos como piezas claves de su identidad, estrategia de experiencia y filosofía global”, explican desde la marca. Su historia empieza en 2006, cuando lanzaron este producto que convirtió algo tan rutinario como lavarse las manos en un gesto de sofisticación. Ese mismo frasco ámbar fue, además, el inicio de la expansión internacional de la firma. Hoy es, todavía, uno de sus best-sellers más reconocibles.
¿Cómo un humilde jabón de manos llegó a convertirse en objeto de culto?
-Ofrece una experiencia de lujo
La respuesta está en la experiencia: “La ducha y el baño, en particular, ofrecen momentos de calma y respiro. Como un santuario sensorial, el tiempo en el baño o la ducha ofrece una oportunidad única para estar solo, aislado por un instante de cualquier interrupción y capaz de centrar la atención en el interior, en lugar del exterior”, explican desde la casa australiana.
-Selecciona los emplazamientos
Ese enfoque explica por qué este jabón está presente en los baños de restaurantes de alta cocina y en las habitaciones de hoteles donde la hospitalidad es una disciplina elevada a arte. Y no, no se trata de puro azar: “Nuestra relación con restaurantes y hoteles se basa en una afinidad evidente y un entusiasmo compartido por la gastronomía y la hospitalidad ejemplares. Si esa afinidad no es evidente, no es concebible ninguna colaboración”, afirman. Por eso, cada acuerdo pasa por reuniones personales con los fundadores para comprender el alma del proyecto.
-Realza una rutina de forma placentera
Pero más allá de la selección cuidadosa de sus socios, la clave del fenómeno está en haber convertido un gesto banal en un símbolo de estilo de vida. “Aesop siempre ha buscado realzar los aspectos más banales del cuidado personal: cepillarse los dientes, lavarse el pelo, aplicar desodorante, etc. Incluso la necesidad diaria más anodina puede realzarse con productos que aporten placer y elegancia a la vida cotidiana”. Una aproximación, por otra parte, muy cercana a la de Rituals, que convierte rutinas en rituales.