La actriz Anabel Alonso ha ofrecido una entrevista en el programa del periodista Javier Gallego, Carne Cruda, en la que no ha dudado ni un segundo en hablar de temas de actualidad como Gaza o sobre los actores que se posicionan políticamente.
Al preguntarle sobre si sus opiniones en redes sociales le han costado algún papel, ella ha confesado que “no sabe si le habrá pasado factura o no”, pero ha justificado que le parece “absolutamente respetable” que “uno pueda expresarse con educación y diga lo que piensa”.
“Es todo tan aleatorio y si el color azul no le gusta a todo el mundo o la paella, por qué voy a gustar yo. Nunca le voy a gustar a todo el mundo, así que, por lo menos, me quedo a gusto”, ha reconocido.
Anabel Alonso ha ironizado con que es lo mismo que si un fontanero va a su casa, le pregunta que a quién vota y si no piensa como ella, le dice que se vaya de su casa de inmediato. “Perdóname, no confundamos. No tiene que haber pensamiento único. Viva la diversidad, todos los colores, tamaños, formas y todo. Cuando me ponían en X ‘sectaria’… Digo, yo todo lo contrario. Si yo lo que quiero es que haya multitud, discrepancias, divergencias”, ha añadido.
“Lo que pasa es que me choca mucho porque yo conocí mucho a la Rosa María Sardà y a Concha Velasco y ellas presentaban mítines del PSOE y fines de campaña y nunca pasó nada. Yo no sé por qué está ahora todo tan arrebatado”, ha señalado.
Al preguntarle sobre lo que pasó el pasado domingo en La Vuelta, ha explicado que a ella le parece “estupendo que se proteste”. “No se protestaba por La Vuelta. Todo empezó porque en un equipo ponía Israel y de ahí vino todo. No era, ‘vamos a boicotear La Vuelta’. De todos modos, creo que se están dando poca prisa en sancionar”, ha razonado.