SEÑOR DIRECTOR:
España acaba de divulgar que el número de turistas extranjeros llegó a 11,02 millones en solo el mes de julio. Colombia espera llegar a 7,2 millones durante todo el 2025. España quiere llegar a 100 millones al finalizar el año.
Estamos lejos, muy lejos. Pero no hay que desfallecer a pesar de los problemas de inseguridad, financiación y competitividad regional en Colombia.
El mayor problema de España ha sido la cantidad de voraces incendios que desaparecieron prácticamente 400.000 hectáreas, que golpearon el turismo rural. Aquí y allá hay situaciones políticas derivadas de la polarización, pero no han afectado este rubro de la economía.
En Colombia, los turistas extranjeros provienen, en su orden, de Estados Unidos, Ecuador y México, y cada uno en promedio gasta 1.642 dólares. En España los turistas extranjeros provienen, en su orden, del Reino Unido, Francia y Alemania, y cada visitante gastó en promedio 1.382 euros, unos 1.616 dólares. Cifras casi parecidas que ameritan una visión cualitativa de los escenarios turísticos.
En resumen: no solo estamos separados por casi 9.000 kilómetros, sino por cómo se comporta el turismo en ambos países.
Fernando Barrero Chaves
(Madrid, España)
Lo que valen son los resultados
SEÑOR DIRECTOR:
Dados estos tiempos preelectorales, pienso que el único papel que ha hecho Petro es haber tratado de conseguir un solo partido de izquierda. Ella siempre ha estado dispersa, y el Pacto Histórico –aparte de querer minar a los partidos tradicionales, meta desde 1991, acentuada en el antiuribismo– quiere erigirse en el sucesor del Eme, esta vez liderando a todos los grupos de izquierda, y poder proseguir en el poder.
Lo preocupante es que por ese objetivo ha dejado de atender muchos asuntos del país: paz, salud, relaciones internacionales, idoneidad pública, anticorrupción, educación, derechos humanos, lo fiscal, y un largo etc., que le resta mucha credibilidad a la izquierda para ganar las próximas elecciones presidenciales, porque tiene muy poco que mostrar y a la gente lo que le interesa son resultados reales.
Juan Guillermo Durán Mantilla
Tristeza mundial
SEÑOR DIRECTOR:
Un terremoto en Afganistán acaba de dejar unos 800 muertos, daños enormes y dolor y más pobreza.
Y más duelo, porque el mundo vive de luto. Miles de muertos en Ucrania, miles en la Franja de Gaza. Pero las guerras dejan también multimillonarios gastos en armas. Ante las tragedias naturales piensa uno cómo sería si esos dineros se pudieran invertir en salvar vidas, en construir mejor y en ayuda humanitaria. Pero es apenas una ilusión, porque no, así no es el orden mundial, ni la humanidad, ni ya casi importa el dolor de los otros. Preferimos matarnos por intereses y odios. ¡Qué tristeza!
Ojalá estas catástrofes naturales sirvieran, al menos, para demostrar que no se han perdido la humanidad y la bondad. Que el mundo sea capaz de movilizarse para llevar ayuda a todos los damnificados. El dolor es uno solo. No tiene raza ni religión.
Carmen Rosa Novoa