Irene Urdangarin comienza el segundo curso en su carrera en Gestión de Hostelería, Turismo y Eventos Hostelería, Turismo y Eventos en la Oxford Brookes University con pena. Por un lado debe separarse de su familia, y por otro, todavía tiene reciente su ruptura con Juan Urquijo, con el que terminó definitivamente en verano de 2025.
La hija de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin y el cuñado de José Luis Martínez-Almeida se conocían de toda la vida porque son parientes lejanos, primos terceros, para ser exactos, y además, sus familias tienen relación. La chispa saltó tras el 18 cumpleaños de la princesa Leonor, donde coincidieron, comenzando una historia de amor marcada por la distancia, algo que pese a todo les fue uniendo en aquellos tiempos.
Irene Urdangarin junto a su madre, la infanta Cristina
Sin embargo, estar separados tanto tiempo, con él en Madrid y ella en Oxford, sí les terminó pasando factura. A finales de agosto de 2025, ¡Hola! informó de una ruptura que llevaba semanas planeando sobre ellos. De hecho, aunque en julio habían viajado juntos al Pazo de Oca, en Galicia, para acudir a la fiesta ofrecida por la aristócrata Allegra Hohenlohe, y posteriormente estuvieron juntos en el viaje a Grecia en el que la infanta Cristina reunió a sus hijos y sus respectivas parejas, como indica Vanitatis, ahí la cosa ya no estaba bien.
Irene Urdangarin, refugiada en su familia
Su amor terminó, pero no su amistad. Han acabado en buenos términos y no tienen problema si tienen que volver a verse, pero no parece que eso signifique que pueda haber reconciliación. Irene Urdangarin viajó a Bidart, destino habitual de los Urdangarin en verano, y también a Barcelona, antes de volver a Oxford, dejando claro que se ha centrado en su familia y ha aprovechado el tiempo con ellos hasta que tenga que decirles adiós.
Pablo Urdangarin e Irene Urdangarin se saludan muy animados en un partido de balonmano del BM. Granollers en Barcelona en noviembre de 2024.
Así se pudo ver en unas imágenes que publica la revista ¡Hola! correspondientes a un partido de balonmano que enfrentó al Fraikin BM Granollers, donde juega Pablo Urdangarin, contra el Barça en la final de la Supercopa de Catalunya, encuentro disputado en el Complejo Deportivo Municipal Las Moreras de Esplugues de Llobregat, y que se saldó con la victoria de los culés por 35 frente a 28.
La infanta Cristina estuvo pendiente de animar a su hijo Pablo, pero también de su benjamina, que no atraviesa su mejor época. Pese a algunos momentos marcados por la melancolía, se ha podido ver a Irene Urdangarin contenta y animada, a lo que sin duda han ayudado sus padres y sus hermanos, Juan, Pablo y Miguel, a los que está muy unida. Y tras las vacaciones y el tiempo en familia, pena por marcharse, pero al mismo tiempo ilusión por volver a Inglaterra y seguir formándose en la universidad.