Un día más en esta edición de la Vuelta a España, las protestas propalestina y en contra del genocidio de Israel han condicionado el desarrollo normal de la decimosexta etapa, entre Poio y Mos Castro de Herville. Este hecho se ha convertido en habitual desde hace una semana, cuando los manifestantes trataron de boicotear la etapa con final en Bilbao por la presencia del equipo Israel Premier-Tech en la carrera.
En esta ocasión, los manifestantes han bloqueado la carretera en el tramo final de la etapa y la organización de la carrera ha tenido que neutralizar la etapa a falta de 8 kilómetros para la línea de meta. Deportivamente, esto se traduce en que, como ya ocurriera en Bilbao, no habrá ganador de etapa y los tiempos se paran en el punto que la organización ha comunicado.
La decisión por parte de la Vuelta se tomó a falta de 15 km para llegar a la meta, cuando el triunfo de etapa se disputaba entre el español Mikel Landa y el colombiano Egan Bernal. Fue en ese momento cuando la organización comunicó a través de su emisora la medida.
“Debido a una protesta que está bloqueando la carrera, el ganador de etapa y los tiempos para la clasificación general se decidirán a 8 kilómetros para la línea de meta”. Anteriormente, las fuerzas de seguridad tuvieron que retirar un árbol atravesado en la carretera en el ascenso al Alto de Groba.
–Noticia de última hora. En ampliación–